Tetraclinis articulata

Tetraclinis articulata

Tetraclinis articulata, sabina de Cartagena, ciprés de Cartagena, arar, araar o tuya articulada son algunos de los nombres que recibe esta reliquia botánica perteneciente a la familia de las cupresáceas.

En estado salvaje se distribuye por el norte de África, en la Isla de Malta y, en la península Ibérica,  en un reducido enclave de la Sierra de Cartagena –Murcia-, donde permanece en forma relicta, es decir, como una muestra viviente de tiempos remotos.

Tetraclinis articulata, sabina de Cartagena, mide entre 3 y 15 metros de altura, aunque lo normal es encontrarla con 7 u 8 como máximo, ya que las mayores dimensiones solamente se dan en zonas que reúnan las mejores condiciones para la planta. Al igual que otras sabinas, es un árbol de forma cónica durante su juventud, que puede adquirir una copa ancha o de porte irregular con los años. El tronco estriado, como en otras sabinas, tiene un color gris con tonos marrones. Las ramas crecen en todas las direcciones y presentan segmentos que le dan un aspecto articulado. Los conos masculinos, pequeños,  nacen en los ápices de las ramas, mientras que los femeninos, de cerca de 2 cm de diámetro, son similares a una pequeña piña, cuyo interior alberga  una o dos semillas.

La madera de arar es muy dura y resistente. En Marruecos se emplea la corteza para curtir pieles. Además, la madera se trata a base de fuego para obtener la denominada “lupia”, usada en trabajos de ebanistería fina para crear objetos de lujo. Ya los romanos conocían las bondades de esta madera que utilizaban para conseguir el aroma que denominaban “citrus”, muy apreciado y de gran valor. La resina, llamada “sandáraca”, sirve para trabajar implantes y cementos dentales, de especial resistencia y dureza.

Como medicinal, Tetraclinis articulata, sabina de Cartagena o arar, es usada popularmente contra diarreas, hemorroides, menstruaciones dolorosas y, de forma externa, para combatir los papilomas.

En definitiva, una especie única en el continente europeo, de la que solamente existen unos ejemplares en la Sierra de Cartagena. Una reliquia botánica de la época en la que los dinosaurios poblaban el planeta. ÁNGEL S. CRESPO para GUADARRAMISTAS

Tetraclinis articulata, sabina de Cartagena. Detalle de las ramas

Tetraclinis articulata, sabina de Cartagena. Detalle de las ramas