El junquillo azul es una liliácea que prefiere suelos calizos y yesíferos, por lo que su presencia está más circunscrita a las zonas de la rampa serrana que poseen estos tipos de suelo. La planta está formada por largos tallos verdeazulados sin hojas –escapos-, que son los encargados de llevar a cabo la fotosínteis. Recuerda a un manojo de juncos en cuyo ápice, de abril a junio, aparecen las bonitas flores azules. ÁNGEL SÁNCHEZ CRESPO para GUADARRAMISTAS