Es una de las mariposas que antes aparecen -lo hace a finales de febrero si la meteorología lo permite-, y que más tiempo nos acompaña -hasta finales de octubre-. Es pequeña -unos 2,5 cm de envergadura- y ocupa todo tipo de hábitats.
Sus vuelos son cortos y rápidos, a baja altura, posándose repetidamente en las flores. Quizá por lo común de su presencia no es del todo apreciada su belleza y la sutileza de su reverso, eso sí, en las pocas ocasiones que permite verlo con detenimiento. ÁNGEL SÁNCHEZ CRESPO para GUADARRAMISTAS