El anverso de esta mariposa no es especialmente llamativo, es blanco con algunas manchas negras. Suele ser frecuente verla volar en casi todos los biotopos, incluso en las zonas altas de la Sierra por encima de los 1.800 metros. Sin embargo, cuando los días de primavera amanecen nublados y la mariposa permanece quieta aferrada a una rama, podemos contemplar su precioso reverso, más llamativo aún en los ejemplares de principios de temporada. Vuela desde marzo a junio, y las plantas nutricias de las que se alimentan sus orugas son algunas especies de crucíferas como Biscutella sp. o Sisymbrium sp. ÁNGEL SÁNCHEZ CRESPO para GUADARRAMISTAS