Coronella austriaca, culebra lisa europea

Coronella austriaca, culebra lisa europea

Coronella austriaca, culebra lisa europea. Una de las culebras más pequeñas de nuestra fauna es Coronella austriaca, la culebra lisa europea, con una longitud algo superior a medio metro y un peso de unos 50 gramos.

En la Península Ibérica, Coronella austriaca se distribuye principalmente por la mitad septentrional. En la zona centro la presencia de la culebra lisa europea se circunscribe a algunas áreas montañosas como la Sierra de Guadarrama y Gredos. A medida que descendemos de latitud es menos habitual, de modo que queda reducida con no muchos ejemplares a enclaves también montañosos de la mitad sur como los Montes de Toledo, las sierras de Alcaraz y Cazorla o Sierra Nevada.

La culebra lisa europea es una de las especies que más están notando los cambios climáticos. En épocas  no tan remotas la presencia de Coronella austriaca era mucho más frecuente, pero el aumento de las temperaturas medias está recluyendo cada vez más a este bonito reptil.

Su hábitat depende de la zona geográfica. En el norte peninsular es mucho más variable, desde arenales costeros a bosques caducifolios, pasando por matorrales, campos de cultivo y huertos. Sin embargo, en las zonas centro y sur se refugia en bosques de coníferas, piornales y roquedos de montaña, hasta los 2.700 metros de altitud.

Su alimentación se basa en otros pequeños reptiles y roedores. Más abundantes son sus depredadores: rapaces, mamíferos como la garduña o la gineta, e incluso los grandes lagartos ocelados.

Coronella austriaca puede observarse durante la primavera y el verano. Tiene una fase de apareamiento al comienzo de la primavera y otra hacia finales del verano o comienzos del otoño. El  período de gestación es de entre tres y cinco meses, y el número de crías varía entre 2 y 12.

Para protegerse de sus depredadores, Coronella austriaca adopta una postura peculiar; aplasta la cabeza contra el suelo para conseguir que ésta adquiera una forma triangular similar a la de la cabeza de las víboras. Este mecanismo le ayuda a disuadir a sus depredadores naturales, pero en cambio, la inofensiva culebra lisa europea sufre las iras humanas que la matan al confundirla con una víbora. Ojalá pronto cambiemos esa obsesión por acabar con nuestros preciados reptiles, cada vez más escasos. ÁNGEL S. CRESPO para GUADARRAMISTAS

Coronella austriaca

Coronella austriaca