Nardus stricta, cervuno. Es una de las gramíneas dominantes en los pastos de montaña o cervunales, llamados así por la presencia de esta planta que llega a tapizar el suelo.
La resistencia de Nardus stricta a los fríos intensos y a la nieve, permite que sea la planta dominante en terrenos donde al resto de la vegetación le resulta difícil sobrevivir. Por ello encontramos espacios donde el cervuno es prácticamente la única planta existente, y zonas en las que se asocia a otras comunidades de gramíneas si lo permiten las condiciones de temperatura y humedad.
Nardus stricta es una gramínea áspera, con alto contenido en sílice y poco nutritiva. Por sí sola es poco apetecible y gustosa para ganado. Las ovejas no gustan mucho de ella, además la humedad reinante en las zonas de montaña donde el cervuno crece, favorece las infecciones en el ganado lanar, muy sensible al “pedero” una infección bacteriológica de los rumiantes causada por la humedad que inflama las pezuñas, las necrosa y puede inmovilizarlos, motivos por los que es raro encontrar ovejas en zonas altas y muy húmedas. Más resistentes son los ganados bovino y caballar que aprovechan los cervunales como último reducto de pastos frescos en verano. En las zonas menos elevadas el cervuno es menos competitivo con otras especies, por lo que convive y permite la presencia de gramíneas más apetecibles para los animales, especies que se ven a la vez favorecidas por el pastoreo para hacerse más abundantes.
Nardus stricta crece en suelos graníticos, silíceos y alcanza los 30 cm de altura, normalmente menos, desarrollándose en densos cepellones. El cervuno necesita humedad, incluso admite el encharcamiento temporal. Florece generando una espiga entre los meses de mayo y agosto según altitud y temperaturas. Se distribuye por toda la Península Ibérica en zonas de montaña húmedas preferentemente del centro y mitad norte.
El nombre más usual de Nardus stricta es cervuno pero también se conoce comúnmente a esta resistente gramínea como cerrillo, grama de céspedes, hierba cerbuna y berceo cervuno. ÁNGEL S. CRESPO para GUADARRAMISTAS