Sambucus nigra. Saúco, sambuco, sabuguero
El saúco Sambucus nigra es un arbusto o arbolillo que puede alcanzar los 5 metros de altura. Sus flores blancas y los frutos maduros se han empleado durante siglos en la elaboración de diferentes remedios medicinales. En muchos pueblos castellanos, el saúco se considera como un dispensario natural con infinidad de utilidades curativas, de las que no escapan fiebres, catarros, artritis, reumatismos, estreñimientos, dermatitis e inflamaciones. Por si fuera poco, también existe la creencia de que sus flores consumidas en infusión favorecen la longevidad.
Sin embargo, no todas las partes de saúco son comestibles y beneficiosas para la salud. Las hojas, la corteza y los frutos inmaduros contienen sambunigrina, un glucósido cianogenético, o lo que es lo mismo, una sustancia que se transforma en el organismo en cianuro de hidrógeno. Los glucósidos cianogenéticos los contienen también otras plantas y frutos, por ejemplo, las almendras amargas, -también las dulces pero en menor cantidad-, o los huesos de ciruela, melocotón, endrino, cerezo y las semillas de peras y manzanas. En estos casos, en vez de sambunigrina su nombre es el de amigdalina, y produce los mismos efectos derivados del cianuro de hidrógeno que van desde vómitos, diarreas y respiración alterada hasta el fallo cardíaco.
El saúco crece en zonas frescas, preferentemente húmedas, como son las proximidades de ríos y arroyos. Las flores blancas muy olorosas aparecen entre mayo y julio en forma de racimos o corimbos. Los frutos maduran al final del verano y tienen forma de bolitas negras, conteniendo de 3 a 5 huesecillos en su interior. ÁNGEL S. CRESPO para GUADARRAMISTAS