Característico de prados húmedos bien abonados por la presencia de ganado, Agaricus campestris es uno de los primeros en aparecer tras las lluvias. El sombrero es blanco y las laminillas de un bonito color rosado. Según se desarrolla, las laminillas se vuelven de color marrón y finalmente negras. Para su consumo es aconsejable que las láminas sean rosadas. No confundirlo con otro tipo de hongos blancos muy similares pero con láminas blancas o con Agaricus xanthodermus que es tóxico. Esta especie tóxica se reconoce fácilmente porque en el momento en que tocamos su sombrero o pie, adquiere un color amarillento. ÁNGEL SÁNCHEZ CRESPO para GUADARRAMISTAS